Uno de Mis Temores!

Hace 20 años mi vida cambió cuando me convertí en madre por primera vez. Dejé de ser la jovencita de 20 años y me hice una mujer responsable. Asumí mi rol de madre y le hice frente a mi nueva vida. Karina y yo fuimos inseparables, vivimos la una para la otra, solo nos teníamos nosotras mismas. 

Mi mayor temor era dejar a mi hija sola. 

Que pasaria con Karina si yo dejara de existir?

Luego llegó mi Amor Chiquito. Ella tiene a su papi con ella, pero no me imagino como seria la vida de ella sin mi.

No le temo a la muerte, pero si a dejar a mis hijas solas. No quiero que sufran.

Porque escribo esto? Ultimamente he visto a muchas personas queridas enfermarse, madres jóvenes han muerto, maestras han sido asesinadas por sus estudiantes, en fin el mundo está vuelto un caos. 

Hoy mientras comía con Karina ella me contó que cuando fue a Africa estaban todos los estudiantes sentados en el patio y vino un viejito el cual comenzó a hablarles sobre sus vidas. El viejito se le acercó a Karina y le habló sobre su futuro. Luego le preguntó si ella tenia alguna pregunta y Karina le dijo que no. Antes del hombre irse le preguntó si su madre estaba viva y Karina le dijo que si. A que no adivinan lo que le contestó el. Le dijo que su madre, o sea yo, me iba a morir de CANCER. Le dijo lo que ella tenia que hacer para curarme cuando el tiempo llegara.

Yo siempre he creído que a mi me va a dar cancer. Yo no me alimento bien, no me cuido y no se porque pero siempre lo he pensado.

En mi vida nunca he ido donde adivinos, no lo he hecho ni por curiosidad. Creo en Dios y confío en EL, pero no les voy a negar que las palabras de Karina me pusieron a pensar.

Todavia no puedo dejar a mis hijas!

Quiero ver a Karina graduarse, formar un hogar, verla establecida. Con Evelis me falta TODO por vivir.

Se que muchos de ustedes me van a decir, no le hagas caso a esas palabras y sigue tu vida. No es que le estoy haciendo caso a las palabras de ese hombre, sino que a veces te pones a reflexionar en la vida, en lo mucho que te falta por hacer y en como tu vida y las de tus seres queridos pueden cambiar en un abrir y cerrar de ojos.

Solo Dios sabe el dia y la hora en que vamos a morir. Solo le pido que cuando llegue mi hora mis hijas puedan seguir adelante. Que mis consejos, mi ejemplo y el amor que les he brindado les sirvan de guía en mi ausencia. Que ambas sean mujeres de bien, bondadosas, justas, honestas, luchadoras pero sobre todo que siempre pongan a DIOS en primer lugar.