Bye Karina

Me ha tomado varios días escribir esta entrada!

El domingo 12 de Junio, Karina se fue a Kenyon College en Ohio por 6 semanas.

Ella fue seleccionada con 11 niños mas para participar en un "internship". 

Todo fue tan rápido que ninguna de las dos tuvimos tiempo para asimilarlo. 

El domingo decidí irme sola para el aeropuerto para poder hablar con ella, fue un viaje terrible. Yo no quería que llegara la hora de ella irse y manejaba lo mas despacio que yo podía. Iba todo el camino hablandole, llorando, con mi corazón destrozado. 

Al llegar alla, la chequearon, volvimos a dar una vuelta en el carro y volvimos a la terminal.

Dios es tan bondadoso con sus hijos que el siempre manda a sus ángeles a socorrernos, por casualidad, Julissa estaba llevando a su mama al aeropuerto y nos encontramos alla y ella me pudo dar apoyo. 

Me dio tanta tristeza ver a mi hija partir, ella caminó y no miro hacia atrás - creo que no quería que yo la viera sufrir.

Karina quiere hacerse la fuerte, la madura, la independiente; pero en el fondo es una niñita mimada acostumbrada a estar conmigo y a que yo le haga todo.

Me fui del aeropuerto con la cabeza dandome vuelta, en ese transcurso me llamaron mami, Milady y Minerva y con ninguna de ellas pude hablar.

Julissa me iba siguiendo y me dijo que nos paráramos a desayunar. Fuimos a un restaurante hispano y ahí me pude distraer un poco. Al llegar a la casa me puse como loca, me fui a su habitación y lloré y lloré hasta mas no poder. No quería hablar, ni ver a nadie.

Era la primera vez que mi hija y yo nos separábamos por tanto tiempo - 6 semanas.

Esa noche amanecí en su cuarto, y la próxima noche y la próxima - a los tres días me fui a mi habitación porque también iba a perder a mi esposo.

Estos han sido los días mas dolorosos de mi vida. Se que todo esto tenia que pasar, que todo es para su bien; pero también se que una parte de mi se fue con ella. Algunas personas creerán que exagero pero mejor me quedo corta. Se que todas las madres aman a sus hijos, pero lo de nosotras es diferentes, fuimos nosotras dos solitas por mucho tiempo, siempre juntas.

Me da pena que ella pase trabajo, ella está acostumbrada a estar sola, tranquila, a que no la molesten!

Le pido a Dios que me la cuide, que no me la deje desviar, que su mente esté enfocada en sus estudios, que si entre ese grupo ella no puede ser la mejor que se sienta orgullosa de sus logros, que no mida sus conocimientos, ni sus logros por una calificación sino por su empeño y dedicación. Pido a Dios para que el día que se enamore lo haga de un joven que la ame y la respete, que nunca pierda de vista los valores familiares y que siempre se acuerde de su Creador.

Sigo triste, apenada, con el corazón roto...sigo esperando sus llamadas, ansiosa porque llegue el día de verla.

Todavía no puedo mencionar su nombre sin llorar, pero estoy segura que Dios me dará fortaleza y que esto también pasará.

Gracias a todos los que me han mandado mensajes, me han llamado y se han preocupado por mi!